La Psicología Infanto-juvenil tiene en cuenta el desarrollo de la personalidad, las emociones y el comportamiento del niño o adolescente en cada etapa evolutiva de su vida. Es por ello, que el psicólogo infanto-juvenil, evalúa e interviene en todos aquellos aspectos que puedan estar interfiriendo en el adecuado ajuste del niño o adolescente a su medio.
La primera visita se realiza con los padres para conocer el motivo por el que creen que el hijo o la hija requieren una ayuda psicológica, para responder a las posibles inquietudes respecto al mismo y acordar aspectos prácticos como frecuencia, agenda, tipo de intervención, etc. Además, para trabajar ciertos casos, existe la posibilidad de desplazamiento al domicilio familiar o escolar para poder tratar o evaluar mejor la situación y poder trabajar de manera coordinada con los padres y/o con los profesores.


Trabajamos problemas como:
- Problemas de conducta
- Separación y divorcio de los padres
- Estado de animo
- Habilidades sociales
- Autoestima y dificultad de aceptación de si mismo
- Problemáticas familiares
- Ansiedad (fobias, miedos, ataque de pánico, obsesiones, somatizaciones)
- Depresión
- Adicciones (teléfono móvil, internet, etc)
- Estrés postraumático y duelo
- Bullying y otras problemáticas del contexto escolar
- Trastornos alimentarios y obesidad
- Problemas de sueño
- Enuresis y encopresis (fallo en el control de esfínteres)
- Hiperactividad
- Consecuencias emocionales asociadas a trastorno de aprendizaje y alta capacidad
- Impulsividad
- Etc.